viernes, 10 de marzo de 2006

Mayoria



Cuando abrí los ojos, mire donde estaba mi padre, vi que el edificio comenzo a desplomarse, mi corazon se destrozo, las lagrimas saltaban de mis ojos sin que pudiera hacer algo, la esperanza que me quedaba se convirtio en dolor, en pesar. Mi madre corria por la calle conmigo en sus brazos, yo miraba el edificio, comprendi que mi padre habia muerto. Con mi madre nos refugiamos en una vieja casa de ladrillo, aun tenia algunos muebles en el salon principal, tenia una escalera y un comedor enorme, mi madre destrozo los muebles de madera para despues quemarlos y poder tener un poco de calor, su rostro se mostraba sereno y pensativo como si a mi papá no le hubiera ocurrido nada. Dios!! mi papá, a esa edad no comprendia lo que estaba acurriendo, sin embargo sentia algo extraño en el corazon, algo que me apretaba el pecho y anudaba mi garganta. Cuando recolectamos madera suficiente frotamos dos trozos hasta que una llama alumbro la sombria decoración.
Pasamos la noche en ese lugar, en la mañana seguimos nuestro cammino a Roma como mi padre dijo. Estoy segura que nos salvaremos ahí, amaba tanto a mi padre...



Sebastian dijo que nos fueramos , yo no lo queria dejar, pero sabia que si me quedaba los tres moririamos, tome a Frances en brazos, baje las escaleras, sali del edificio y corrí lo mas rapido que pude por la calle, tropese, caí, un golpe en la cabeza me dejo casi sin conocimiento, temia por Frances pero vi que ella estaba aún en mis brazos sin ningun razguño, segui corriendo, y a unos tresientos metros escuche una enorme explosión, mi corazón se paralizo y un sentimiento de amargura se apodero mi cuerpo, supe de inmediato que Sebastian habia muerto, Frances no sabia que habia ocurrido. LLegamos a un lugar, a una casa vieja y grande, entramos, buscamos el subterraneo, habia leños y pieles, nos cubrimos e hicimos una fogata, el dolor por la perdida de Sebastian..., ¡Oh Dios Sebastian!, llore toda la noche sin que me escuchara Frances.
Al amanecer fui a inspeccionar los alrededores, tratando de no alejarme mucho de la casa, parecia que no habia peligro, busqué a Frances en el subterraneo, ella aún seguia durmiendo, la desperté, la tome en brazos y caminamos hacia Roma...



Logre escapar del fuego, era demasiado tarde para Javier, él ya estaba muerto. Bajé la escaleraas en busca de Valeria y Frances, cuando llegue a la calle ellas estaban ya lejos, ¡Valeria eres tan valiente!, Corri hacia ellas pero el sonido de una avion hizo que temiera por sus vidas, que impotencia sentia, tenia un mal presentimiento y ¡no podia atraerlas hacia mi!, el ruido estaba cada ves mas cerca, cuando estaba a unos cincuenta metros de ellas vi caer un objeto, era otra bomba, estaba justo arriba de nosotros, crei que ese seria el final, deje de correr, sonrei les grite que las amaba y espere lo peor...esperando lo peor...
Cuando desperte estaba en un hospital y solo pensaba en Roma...