La vida más allá del recuerdo

Nuestro amor va más allá de lo físico, que por cierto es increíble, es algo de alma, de almas gemelas, es algo que ni el tiempo ni la distancia ni otras personas nos van a quitar, es sentirse completo con tu alma gemela, es saber que te entiende, que no te recrimina, es saber que en realidad si existe amor, pero la vida se encarga de mantenerte lejos, agradezco a la vida por haberte conocido pero también la desprecio por haberte quitado de mi lado.

Pero el recuerdo es casi real, es casi como tenerte aquí, conmigo. Es sentirte, identificar tu aroma, sentir tus caricias, experimentar el placer de escuchar tu voz, es tan claro en mi mente, al cerrar mis ojos tus estas aquí, estas tan presente, pero tu recuerdo no es ni la sombra de lo que eres.

En la mira

Entro a la celda, las paredes repletas de símbolos irreconocibles, dibujos y figuras me entretienen mientras llego al lugar que me ha sido asignado, los guardias que me han guiado me miran con pena, saben que la justicia esta vez no ha actuado de la mejor manera. Se quedan junto a mi mientras llega el verdugo, lo oigo y veo su majestuosa silueta cruzar el portal, me sorprendo al darme cuenta de es una mujer, una hermosa y delgada mujer de pelo negro y corto, ojos azules y nariz aguileña. Me mira y logra que por un instante me olvide del lugar en donde me encuentro, hace un gesto y mis guardias, ya sin poder disimilar la pena y con lagrimas en sus ojos, se retiran no sin antes despedirse de mi, dicen algo, pero el ruido no me permitió reconocer el sonido, aunque los labios de uno articula la palabra "amo". Al cerrarse las puertas de la celda, reacciono, me doy cuenta de donde estoy, hay más gente conmigo, mujeres y hombres a mi lado, mirando al verdugo con la misma cara de miedo que supongo que tengo yo. Nos mira con seguridad y dice: "buenas tardes, vayan al fondo y cojan el juguete que quieran, comencemos jugando!".

Las alegría invadió la sala, debo reconocer que el jardín infantil es mejor de lo que esperaba.